Era el año 2003 cuando, gracias a varios vecinos de Lerma, se encontraron varias fosas comunes cerca de Aranda. En el momento en que se grabó este reportaje se habían recuperado 56 cuerpos, todos de varones, y localizados en fosas comunes de la Guerra Civil ubicadas en el monte Costaján, en el término municipal de Aranda de Duero. Más tarde se informaría de que en esta zona se llegaron a exhumar un total de 81 cuerpos.
Los familiares de las víctimas pedían ayuda para poder encontrar todos los cuerpos y «así poder cerrar el círculo y olvidar el odio y rencor que sentimos desde entonces», afirmaba Amperio Antón, hijo de una de las víctimas.